EL DEBATE: Super-ordenadores, evolución y “la basura” de la vida: ¿Cómo pueden los estudios sociales de la ciencia contribuir a un desarrollo más reflexivo de la biología sintética y de sistemas?


Por Ana Delgado, Dorothy Dankel y Silvio Funtowicz

Centre for the Study of the Sciences and the Humanities, Universidad de Bergen, Noruega.

1. Y se hizo la vida

En mayo de 2010, el biólogo norteamericano Craig Venter, presentó ante la prensa a “Synthia”, la primera célula sintética. (1) Durante esa semana y las que le siguieron, Synthia fue objeto de la atención de los medios de comunicación internacionales que en la mayoría de los casos la presentaron como la primera forma de vida artificial. En palabras de Venter, Synthia era descripta como: “la primera especie cuyos padres son un ordenador”. En una entrevista con El País, Venter explicaba que la vida es en última instancia reducible a “información” genética. El “texto” de la vida puede ser “leído” al decodificar secuencias de ADN y, gracias a los super-computadores, también puede escribirse: diseñando y sintetizando secuencias de ADN. Venter declaraba, “la evolución de la vida ya no es un fenómeno natural”. La visión de una evolución creada por el hombre que Venter propone ha desatado reacciones en grupos de la sociedad civil. (2) En medio de esta polémica, Hamilton Smith, un colaborador de Venter, fue entrevistado. A la pregunta de si “¿Están ustedes jugando a ser dios?”, Smith responde:

“Nosotros no jugamos”. (3)

Las reacciones ante el fenómeno Synthia no vinieron sólo por parte de sectores de la sociedad civil. Mientras Venter se proclamaba como el inventor de la primera célula sintética, biólogos de todo el mundo reaccionaban argumentando que Venter simplemente había sintetizado una secuencia de ADN más larga de lo que se había hecho hasta entonces. Para muchos científicos Synthia es un logro técnico, más que un avance científico revolucionario. En esta controversia está en juego la misma definición de qué es la vida. El fenómeno “Synthia” puso de manifiesto cómo, dentro de la comunidad de científicos que se dedican a la biología sintética y de sistemas, hay una gran diversidad de modos de imaginar la vida y la posibilidad de fabricarla.

2. Super-ordenadores, evolución y la “basura de la vida”: Imaginarios científicos

La biología de sistemas y sintética tienen, de diferente manera, un foco de interés en la cuestión de la fabricación de la vida (Fox Keller, 2002). Mientras que los biólogos de sistemas modelan y simulan sistemas vivos, los investigadores en el campo de la biología sintética están interesados en diseñar y fabricar formas vivas. En ambos casos, la existencia de poderosos ordenadores hace posible la investigación científica: gracias a esta tecnología es posible manejar enormes cantidades de datos, se pueden resolver complicadas ecuaciones, se usan programas de ordenador para leer y escribir secuencias de ADN.

Es interesante resaltar como en estos campos de la “nueva” biología, los ordenadores no sólo son el medio que hace posible la investigación: también se usan como un marco de pensamiento en el que la vida se describe y se explica. La vida es imaginada en términos de información y se explica usando la analogía del ordenador (Fox Keller, 2002, Powell, 2007). Siguiendo esta analogía, los procesos naturales finalmente se describen en términos de codificación y decodificación de proteínas. Esta manera de imaginar la vida incluye ideas del viejo paradigma de la evolución y, por tanto, asume que siguiendo las leyes de la selección natural los genes “saben” dónde, cuándo y cómo codificar proteínas. Evolución y expresión genética aparecen aquí como las claves que definen “el programa de la vida”.

Al tiempo que comparten este imaginario general sobre como funciona la vida, los investigadores en biología sintética y de sistemas difieren en sus diversos enfoques, visiones, motivaciones y ambiciones. Entender el “programa” de la vida, ser capaz de predecirlo, mejorarlo, modificarlo o rediseñar totalmente nuevas formas de vida son algunas de esas ambiciones. Dentro de estas comunidades científicas, hay una gran diversidad de maneras de entender hasta dónde se puede jugar con la posibilidad de fabricar vida. Diferentes perspectivas y formas de entender la complejidad, la predictibilidad, el control y los límites de las intervenciones humanas están en la base de diferentes tradiciones de investigación, informando la prácticas de grupos de investigación concretos.

En el proyecto RSB, nuestro trabajo con científicos en laboratorios incluyó extensas conversaciones sobre la pregunta: “¿Qué es fundamental para que la vida se desarrolle?”. (4) Por mencionar un ejemplo ilustrativo: durante estas conversaciones, dos científicos en diferentes laboratorios se refirieron a lo que ellos denominaron “ADN basura”. (5) El investigador A trabajaba en el campo de la biología sintética. Viene de una tradición de ingeniería genética clásica en la que el ADN que no tiene función se considera superfluo, “ADN basura”. El investigador B trabaja en el campo de biología de sistemas y viene de una tradición de biología evolutiva en la que la vida se entiende desde una perspectiva relacional y procesual. Ella argumentaba que en aquello que “no conocemos” pueden encontrarse las propiedades fundamentales de la vida, particularmente en lo que se ha llamado “ADN basura”. La investigadora B explicaba cómo la evolución es un proceso complejo y cómo, en consecuencia, sólo pueden hacerse predicciones parciales. El investigador A defendía que el comportamiento de los “diseños sobre la naturaleza” que producen en su laboratorio es predecible y controlable.

Reflexionando sobre estos imaginarios de la fabricación de la vida, cuestiones éticas y sociales emergen. Por ejemplo: cuestiones relacionados con la economía política de la producción científica, incluyendo los asuntos relacionados con los de derechos de protección intelectual. La distinción tradicional entre “descubrimiento” e “invención” parece ser crucial en este sentido. ¿Se ven los científicos a sí mismos como “descubriendo” algo que existe ya en la naturaleza, “modificándolo” o “inventando” artefactos completamente nuevos? Esta distinción no es sólo relevante desde un punto de vista epistemológico, metodológico y legal (en el sentido de, por ejemplo, patentes sobre la vida construidas y justificadas sobre la base del “derecho natural”). También se relaciona históricamente con diferentes tipos de “contrato social”: por un lado, la ciencia (o, tradicionalmente, la filosofía natural); por el otro, las que llamaremos “learned arts” (la medicina, la ingeniería y la arquitectura, entre otras).

Aún más, esta distinción está directamente relacionada con la cuestión de la sostenibilidad en tanto que prescribe diferentes estilos de apropiación de la naturaleza. Este es el tipo de cuestiones que exploramos con los científicos en el proyecto RSB mediante series de sesiones dialógicas. La mayoría de los científicos que hasta el momento han colaborado en este proyecto han expresado que estas colaboraciones han sido sugerentes y útiles, y han valorado como positiva la experiencia de tener la oportunidad de hablar de cosas que “la gente muchas veces está pensando, pero que no se discuten”.


Notas al pie

 

(1) Véase http://www.ted.com/talks/craig_venter_unveils_synthetic_life.html

(2) Véase, por ejemplo, el informe del grupo ETC: “Ingeniería extrema”.
</spa n>

(3) Véase http://www.edge.org/3rd_culture/highfield06/highfield06_index.html.

(4) Véase Reflexive Systems Biology: Towards an Appreciation of Biological, Scientific and Ethical Complexity.

(5) Las entrevistas fueron siempre en inglés y la expresión original era: “Junk DNA”.

 

 


Referencias bibliográficas

 

FOX-KELLER, E. (2002): Making Sense of Life: Explaining Biological Development with Models, Metaphors, and Machines, Cambridge, Harvard University Press.

 

JASANOFF, S. y SANG-HYUN, K. (2009): “Containing the Atom: Sociotechnical Imaginaries and Nuclear Power in the United States and South Korea”, Minerva, vol. 47, nº 2, pp. 119-146.

 

POWEL, A., O’MALLEY, M., MÜLLER-WILLE, S., CALVERT, J. y DUPRÉ, J. (2007): “Disciplinary Baptisms: A Comparison of the Naming Stories of Genetics, Molecular Biology, Genomics and Systems Biology”, History and Philosophy of the Life Sciences, vol. 29, pp.5-32.

 

Publicado el 9 de abril de 2012

  1. En casa de científico, dogma respetado
    Interesante ensayo, una de las cosas que llaman la atención es el uso discursivo de los conceptos científicos y de su incertidumbre asociada.
    Conceptos teóricos como “evolución” son utilizados como un hecho, como una evidencia empírica, a veces como una teoría, como una explicación de otro fenómeno, etc.
    Y todo eso aceptando como principal supuesto la indeterminación a priori. Pero algunos científicos la olvidan y mezclan otras creencias en sus opiniones científicas.
    Esto ocurre también con conceptos de la sociología, de la economía, de la ecología, de la física, etc.
    Al fin y al cabo, como dice un libro de divulgación: “el científico también es un ser humano” y carga con un monton de otras cuestiones “extra-científicas” que condicionan su comportamiento.
    La nota me hizo recordar mucho el cuento de Anatoli Dneprov “LOS CANGREJOS CAMINAN SOBRE LA ISLA” escrito en 1958, donde muchas de estas cuestiones; intereses políticos, económicos, de prestigio y de “ganar la competencia académica”; se hacen presentes en la trama con un final no esperado (por el científico protagonista).
    ¿Será por todas estas cosas que a los científicos no les gusta que los investiguen?

  2. Super ordenadores evolución y basura de la vida
    Desde mi punto de vista considero que no se puede crear nada de la nada siempre se toma algo de lo que ya existe por lo tanto hablamos de un descubrimiento.
    Que los aportes ayudan a la vida ayudan pero siempre existe el temor del otro lado de los que utilizan los descubrimientos hacia el lado oscuro y de ello no se sabe el efecto que puede tener

  3. darwinismo o biologia
    Hola.
    A mi me interesa plantear unas cuestiones que se enuncian en el articulo.
    La biologia tiene un gran problema que es la incapacidad de definir un marco teorico verdaderamentre cientifico. Esto no es un problema menor, por el contrario, es fundamental. Y esto lleva a que se presenten posturas muy diversas y opuestas. El darwinismo desde su genesis esta basado en falacias, metaforas, tautolgias, razonamientos circulares, proyecciones economicas y antropocentricas, etc. que han llevado a la biologia a un caos que impide una apreciacion certera del objeto de estudio.
    Esta especie de \»vanguardia\» en la que podemos colocar a Venter sigue ciegamente hacia adelante impulsados por el dinero y en ese andar torpe y acelerado se llevan por delante a la biologia.
    Por dar solo un ejemplo: decir que \»la vida es en última instancia reducible a “información” genética\», seria argumento para decir que cualquier naturalista frances en 1800 sabía más de biología que Venter. (si, sin saber de dna, genes, virus, dna basura, etc). Lo digo porque de ninguna manera la vida puede reducirse a eso. La vida es una propiedad emergente de los sistemas complejos autoorganizados y autopieticos. Una secuencia de DNA es nada sin un contexto, el dna puede verse como la memoria de la especie que se utilizara de acuerdo a las condiciones. Es el disco rígido donde ha quedado grabada la historia evolutiva. Sobre todo esto hay una extensa bibliografía.
    Otro punto: venter y su célula \»fue(ron) objeto de la atención de los medios de comunicación internacionales\». Esto no puede usarse como prueba de nada, los medios dicen cosas de las cuales la mitad son mentiras (exageraciones, mal interpretaciones) y la otra mitad puro darwinismo del que uno se alimenta en la misma sociedad, porque el darwinismo mas que una teoría científica es una visión del mundo que llega a toda la sociedad. Los medios no hacen más que retroalimentar un círculo vicioso.
    Respecto al concepto de DNA basura, es un error de interpretación, un prejuicio darwinista en el que todo lo desconocido es basura y todo lo conocido es malinterpretado con el velo darwinista. Hoy por hoy pueden quedar darwinistas algo atrasados que sigan utilizando estos desafortunados términos pero hasta para ellos es obsoleto puesto que aun con tantos genomas secuenciados, poco se sabe (el mismo venter participo de la secuenciación), y ese dna basura es dna viral y bacteriano que fue cosntituyendo las especies (transformación o evolución por integración de sistemas, no la tautológica selección natural) pero había que apresurarse para justificar mediante el reduccionismo darwinista la existencia de genes de enfermedades , las farmacéuticas iban a encontrar la panacea mientras se llenaban los bolsillos. obviamente solo se llenaron los bolsillos. Para muchos biólogos (me incluyo) esto era obvio, pero para muchos esto no significa nada y siguen ciegamente hacia delante. Uno se queda estupefacto pues no puede creer que sean poco lucidos (asumo que son inteligentísimos) entonces la opción que queda es que la necesidad de mantener a perpetuidad el dogma darwiniano implica otras razones.
    La teoría darwiniana es un marco teórico obsoleto ante los nuevos descubrimientos, además de estar basada en la tautología de la selección natural y pretender que la evolución es una proyección de la variabilidad dentro de poblaciones (los genomas y cientos de descubrimientos, lo contradicen), en ese marco, plagado de metáforas, pretender definir la vida como una mera secuencia genética, es por lo menos, ridículo. Con todo esto, asumen ser capaces “ predecirlo, mejorarlo, modificarlo o rediseñar totalmente nuevas formas de vida” (¡!). En todo caso, no son mas que experimentos de ingeniería genética en un sistema vivo que resultan en mas preguntas que respuestas (dado todo lo anterior) y no aportan un conocimiento evolutivo, porque las evidencias los llevarían a darse con que es momento de dejar al darwinismo por dogmático e inútil y comenzar a construir una nueva teoría evolutiva.

  4. Sigue siendo un misterio…
    Muy interesante y era de esperarse a synthia, y la resistencia entre los científicos para considerarla una célula como la nombra su autor, y se presenta la polémica además, para definir el hecho como un suceso técnico o un avance científico, nuevamente ¿que es primero la ciencia o la tecnología?

    M de Jesús

  5. Muy interesante el artículo, especialmente la cuestión de la contraposición entre la perspectiva de la biología de sistemas con la de la biología sintética. Los ideales de conocimiento parecen ser diferentes en cada caso, el primero ligado al discurso clásico de la ciencia pura, de conocimiento por el conocimiento, o de una ciencia básica que rehúye la reflexión y la responsabilidad sobre las eventuales implicancias de sus descubrimientos; el segundo, en cambio, vinculado a un ideal más tecnológico de creación artefactual, que toma de facto postura -aunque no necesariamente reflexiona- sobre los debates éticos y las consecuencias políticas de sus creaciones.

    Sin embargo, si bien en el nivel de la subjetividad de los investigadores, los biólogos de sistemas puedan pretender que meramente producen conocimiento acerca de los porqués, seguramente al analizar la constitución de las agendas y la relevancia actual de ese campo interdisciplinario, puedan encontrarse intereses industriales similares a los que guían un proyecto más explícitamente comercial como la biología sintética.

  6. super ordenadores evolucion y la basura de la vid
    Me interesa leer un poco la propuesta ,es posible que me regale informacion? me puede enviar archivo a mi correo
    MARIA EUFEMIA FREIRE
    cALI -cOLOMBIA

  7. una versión más larga de este paper existe!
    Hola a todos,
    Silvio, Dorothy y yo os agradecemos mucho vuestros comentarios… hubiera sido interesante tener un poco más de espacio para poder desarrollar cuestiones relacionadas con la metáfora de la \»evolución\», como indican algunos de los participantes en el foro. También hubiéramos querido profundizar más en cuestiones relacionadas con \»propiedad intelectual\» del conocimiento. Como indica uno de los comentaristas, existen diferencias entre biología de sistemas y sintética que son importantes, no solo a nivel epistemológico sino también en el nivel de economía política de la ciencia. Todo esto lo desarrollamos más en un artículo que se llama:\»Super-computers, evolution and the fabrication of life: How can Science and Technology Studies (STS) contribute to more reflexive developments in systems and synthetic biology?\» y que será publicado en el Journal of Social Ecology and Sustainable Development pronto.

  8. Si, estos temas sobre metáforas de la evolución son muy interesantes. Creo que J. Dupré ha tratado a fondo esta cuestión de las metáforas del Darwinismo. A nosotros en este trabajo nos interesaba sobre todo ver, cómo pensaban los científicos su propio papel en relación con la naturaleza: como creadores, como descubridores…Y como esto está relacionado en maneras interesantes con el tipo de propiedad intelectual que reclaman.

  9. descubrimiento e invención
    la distinción entre descubrimiento e invención es sin duda interesante. Aunque personalmente pienso que no existe tal distinción, pues un descubrimiento es siempre una invención en alguna medida. Lo que es interesante es hasta que punto la condición de invención es hecha explícita, y como esto legitima ciertos sistemas de propiedad intelectual y no otros (i.e. patentes).

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *